El actor de comedia británico Ricky Gervais presentó la ceremonia de entrega de los premios Golden Globes en cinco ediciones diferentes y, tras la segunda, la tercera y la cuarta ocasión en que consiguió ofender a casi todos los presentes, aseguró que nunca más volvería a hacerlo, solo para acabar cambiando de opinión unos pocos meses más tarde y regresar de nuevo.
El creador de la serie “The Office” también había afirmado en varias ocasiones que jamás lo contratarían para ponerse al frente de la noche más importante en la meca del cine -los Óscar-, por miedo a lo que podría decir desde el escenario. “Bueno, a lo mejor me dejarían presentarlos si hiciese todo lo que me dijeran. Pero ahí está el problema. Lo bueno de los Golden Globes es que me permitieron escribir mis propias bromas, decir lo que quisiera y no ensayar nada. Y esa es una oportunidad demasiado buena como para que un humorista la deje escapar. No creo que los Oscar me dieran tanta libertad… ¡Estarían locos si lo hicieran!”, aseguró a su paso por el programa “The View”.
Sin embargo, también da la casualidad de que la entrega de premios está buscando desesperadamente un maestro de ceremonias después de que en los últimos tres años se haya llevado a cabo sin presentador. Aunque Tom Holland se ofreció recientemente a ocupar ese puesto, Gervais sabe de sobra que él atraería a un público mucho mayor por el morbo de ver a las celebridades ponerse nerviosas en su presencia. Por esa misma razón no ha podido resistirse a hacerle llegar una propuesta a la Academia de Cine.
“Si me deja, si dicen que me permitirán hacer todo lo que acabo de decir, entonces lo haré. ¡Lo haré gratis!”, prometió. Whoopi Goldberg, ganadora del Óscar y quien se encontraba entre los panelistas del programa, le aseguró a Ricky que hablará a su favor con los miembros de la Academia para tratar de que le den una oportunidad.